Escoger entre miles de modelos de smartphones y sus respectivas cámaras puede resultar abrumador, por lo que es necesario conocer tanto las características del terminal como de la cámara. Debes saber que cualquier cámara hará buenas fotos si hay buena luz y fotografiamos algo estático, pero con poca luz u objetos en movimiento las cosas se empezarán a torcer.
¿En qué debes fijarte para que esto no pase?
Resolución
La resolución es la cantidad de puntos que el sensor capta y después serán convertidos en píxeles de la imagen, por eso se mide en megapíxeles (millones de píxeles). Una resolución alta permite recortar la imagen o usar el zoom digital sin que la calidad disminuya tanto así como imprimir en gran formato.
Sin embargo, una resolución muy alta en un sensor muy pequeño puede hacer que en condiciones de poca luz aparezca el denominado “ruido” que no es más que esa granulosidad que aparece a veces. Un ejemplo de que no hace falta una enorme resolución para tomar buenas fotos es el iPhone que siempre apostó por una comedida. En el iPhone 7 plus se ha tratado de subsanar esto con una segunda cámara que hace las funciones de zoom para evitar tener que recortar.
Tamaño del sensor
Este dato está muy relacionado con la resolución, un gran sensor permitirá más espacio para más resolución sin minimizar el tamaño de los píxels al máximo lo cual hace que el problema del ruido sea menor. Los tamaños de los sensores pueden ser entre 1″ los más grandes y 1/3″ los más pequeños mientras que una cámara profesional suele tener un tamaño de sensor de 1.7″.
Apertura
La apertura es ese número que va siempre junto con una f (f2, f2.5, f2.8,…). Cuánto menor sea, más luz entra en el sensor de modo que se podrán hacer fotos con menos luz sin aumentar el tiempo de exposición y sin que salgan movidas. Además, una apertura grande permitirá realizar primeros planos con un bonito desenfoque del fondo (bokeh).
Estabilización
Las cámaras pueden tener un estabilizador que trata de evitar los movimientos bruscos que realicemos. Cuando hay poca luz permite que ‘estas no salgan movidas, en el caso de los vídeos evita esos rápidos y cortos movimientos que se hacen tan molestos. Existen dos tipos de estabilización, la digital, que es parte del postprocesado del archivo de vídeo y la óptica, que es, sin duda la que consigue mejores resultados.
Enfoque
Existen diferentes métodos de enfoque, los más usuales son la detección de fase, el contraste y el láser. Lo usual es que los móviles utilicen sistemas híbridos de detección de fase y contraste para conseguir mejores resultados, incluso acompañados del láser.
El enfoque láser permite dos cosas, por un lado; una mayor velocidad de enfoque y por otro lado; enfocar en situaciones de luz escasa sin usar flash.
Software
Al sacar una foto, la información que obtiene el sensor debe ser procesada por el smartphone. Cada marca, cada teléfono, incluso cada programa la procesa de una forma y por eso los resultados, incluso compartiendo sensor y componentes son muy diferentes. En Android, por ejemplo, si tomamos una fotografía con la cámara del teléfono y otra con la de whatsapp puede haber notables diferencias entre ellas.
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